viernes, 7 de septiembre de 2007

Esta semana no he parado, porque he estado haciendo muchos recados como preparación del viaje que haré a España la semana que viene. Espero hacer fotos algún día para documentar mis escritos.
Durante esta semana, un tifón ha azotado a Japón, y ayer y hoy ha sido básicamente cuando ha azotado más fuertemente a Tokio. Ayer había alerta de tifón para hoy, pero al final no ha habido tal alerta; aún así, se han bloqueado varias líneas de tren, y por ejemplo, mi academia de Japonés no ha abierto, aunque yo sí que he ido porque no me he enterado de que estaba cerrada. Ayer dijeron en la academia que no abrirían si había aviso de tifón para hoy, pero no ha habido tal anuncio en la televisión, y por eso fui. Pero vamos, que no pasa nada.

Lo que me gustaria hablar es acerca del viento. Los paraguas aquí duran dos telediarios, porque el viento es tan fuerte a veces hace muy difícil poder torearlo con atino y soltura. Al más mínimo error, te has quedado sin paraguas. Lo digo en serio, hoy he visto muchísimos paraguas hechos añicos en las aceras, incluso el mío se ha hecho rotos, y ayer a mí novia le pasó lo mismo. Ya me pasó en abril, aunque esa vez el paraguas no era mío, lo había cogido prestado.

No hay comentarios: